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Así está el hijo menor de Tomás Fonzi: tiene 6 años y es muy parecido al actor

Tomás Fonzi tiene dos hijos: Violeta y Teo. Desde su cuenta en Instagram, posteó unas fotos de ellos y sorprendió el gran parecido que tiene con el más chico.

Tomás Fonzi, quien se terminó de ganar el corazón de todos en su participación en Masterchef Celebrity, sorprendió al hacer un posteo en sus redes. Se trata de una publicación en la que mostró a sus dos hijos, Violeta de 12 años y Teo de 6 años. La sorpresa que se llevaron sus seguidores, fue el gran parecido que hay entre el menor de los pequeños y el reconocido actor.

Recordemos que el hijo de Dolores Fonzi, está en pareja con Leticia Lombardi, con quien se casó tras más de 15 años en pareja. Fruto de esa relación, nacieron sus dos hijos. "Un minifonzi! y una minileti!!!", le escribieron en la publicación que cosechó más de 3mil me gusta.

“Soy padre de familia, entonces, le informás a la AFIP. Yo para ellos era soltero, pero no: soy padre de familia, con mi señora esposa y toda la cosa”, bromeó hace un tiempo el actor, sobre su familia.

Recordemos que actualmente, el actor está presentando junto a Cachete Sierra, Cande Vetrano y Mery del Cerro, la pieza teatral "La Verdad".

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Hijo de Tomás Fonzi

Hijo de Tomás Fonzi

Tomás Fonzi contó qué fue lo más odió de MasterChef Celebrity

“Todas las teles de mi casa estaban prendidas a un canal de cocina. De hecho, me han salvado las papas más de una vez. Me ha pasado de buscar a los chicos, darles la merienda y poner un programa de cocina”, añadió luego Tomás Fonzi, quien contó con todo el apoyo del público al saberse que quedó en segundo lugar.

Posteriormente se refirió a Damián Betular, Donato de Santis y Germán Martitegui: “Donato es un rockero, tiene alma de rockero. De hecho, no sabés como canta y pegamos onda también. Con Betular había algo de ‘porque te quiero te aporreo’, una cosa medio severa, pero yo decía que era como un palazo de dulce de leche. Y Germán, la verdad, muy objetivo siempre, más allá de su hermetismo y frialdad. También manifestó su cariño y fue muy proactivo en las devoluciones”, argumentó.

Y quizás en el final fue cuando se sinceró más: “Lo que más odié del programa, obviamente, es ese maldito reloj. Básicamente lo que odié del reloj fue que a veces terminás maltratando una preparación que venís llevando adelante con mucha dedicación o alguna materia prima. Freír papas fritas en un litro de aceite, en mi casa, jamás. El reloj fue un enemigo número 2”.