Ya casi se acaba la primera temporada de "El Hotel de los Famosos" y aunque hay momentos que pareciera que todo está bien entre todos los participantes, también otros en los que la tensión es tan fuerte que el ambiente se podría cortar con una tijera.
"El Hotel de los Famosos": Martín Salwe y Locho Loccisano casi a las piñas
La mala onda entre Martín Salwe y Locho Loccisano llegó al clímax en la última emisión de "El Hotel de los Famosos".
Esto quedó demostrado en la emisión de este miércoles cuando Locho Loccisano y Martin Salwe casi se van a las manos.
Todo ocurrió cuando en medio de un desafío en el que los participantes debían rodar un barril para llevar tres tótems hasta un punto, luego cortar algunos trozos de madera con un hacha para posteriormente cortar una soga y pasar a una etapa siguiente en la que tenían que derribar cuatro cuadros con una pelota Locho Loccisano tuvo problemas con su hacha e intentó hacer trampa.
Aunque su arma se quedó sin filo y no pudo cortar la soga, el notero siguió hasta la etapa de los cuadrados y las pelotas, donde Martín Salwe había llegado limpiamente. "No vale, no vale”, dijo el locutor mientras detenía el avance del notero.
“Paren todo”, dijo rápidamente el Chino Leunis y acto seguido reinició el juego. En la segunda pasada, Locho Loccisano incurrió en lo mismo y Martín Salwe nuevamente se quejó.
Ante la denuncia de Martín Salwe, Locho Loccisano le reclamó: “No hay que quejarse, pa. Yo gano con la cabeza. Mirá, la bondad siempre gana, pa”.
Las palabras del aparente compañero sentimental de Majo Martino enojaron profundamente a Salwe, que salió al cruce fuertemente. “¿Qué te pasa pelot…? ¿A quién pu…, bol…?”, le dijo el locutor al notero mientras se disponía a ir tras de él. Afortunadamente, Alex Caniggia intervino de forma oportuna y evitó que la situación pasara a mayores.
Desde que Locho Loccisano entró a "El Hotel de los Famosos", él y Martín Salwe nunca han logrado establecer un vínculo de buena onda. Todo lo contrario, en la construcción de sus personajes en el reality, el primero quedó como el bueno y el locutor como el villano.