Sol Pérez transita su cuarto mes de embarazo, y aunque al comienzo de esta nueva etapa presentó los síntomas típicos del primer trimestre, se mantiene muy activa: sigue en la televisión y también va todos los días al gimnasio.
En su perfil de Instagram, la panelista compartió un video en el que aparece haciendo su estricta rutina de ejercicios, y se animó a hacer los famosos burpees.
"Mi bebé tiene 18 semanas y pasó de ser un coco a un racimo de uvas. Mantenerse activa ayuda a mejorar tu energía, reducir el estrés y preparar tu cuerpo para el gran día", escribió Sol Pérez, adelantándose a los comentarios de aquellas personas que cuestionan a quienes entrenan durante el embarazo.
Además aclaró: "Siempre escuchando a tu médico y a tu cuerpo". Días atrás, la famosa mostró cómo realiza versiones moderadas de ejercicios clásicos, mostrando que el fitness y el embarazo pueden ir de la mano. "Mi bebé es un Mango y quería movimiento… que mágico todo este nuevo mundo!”, puso en otro posteo.
Sol Pérez reveló cómo se llamará su primer bebé
Sol Pérez está transitando una maravillosa etapa. La panelista de "Cortá por Lozano", anunció hace poco su embarazo y en la espera de su primer hijo junto a Guido Mazzoni, reveló cómo va el proceso de la elección del nombre.
En conversación con "A la Barbarossa", la también influencer reveló que aunque aun no conocen el sexo del bebé: "Guido está con que es varón y le quiere poner Marco Aurelio”, dijo y sumó su posición al respecto: “A mí me gustan, pero separados, no los dos. Pensamos en un solo nombre”.
A su vez, contó cuál es la opción de ser una nena: “Si es nena nos gusta mucho Francesca”, además detalló cómo se siente en su embarazo en el que va circulando el tercer mes: “Me siento súper bien. Ya entré en el segundo trimestre, entonces estoy mejor y no tengo tanto asco. O sea, vivía con asco y me levantaba con acidez. Pero después la pasé bastante bien, por suerte y no me puedo quejar. ¡Es rarísimo todo!”, reveló.
Además, dijo: "Hasta cambié los gustos de la comida. Ahora estoy muy por lo salado. Antes cuando me levantaba comía huevos revueltos y ahora, por ejemplo, no los puedo ni ver. Lo que antes era re normal y formaba parte de la rutina cotidiana, ahora ya no me gusta tanto”, cerró.