Netflix se anotó miles de puntos en la competencia de los servicios de streaming con la reproducción de la serie española “Intimidad”, la cual logró posicionarse entre las tres primeras más vistas en Argentina durante varias semanas.
La serie ya destaca como una de las mejores en 2022 pues puso el dedo en la herida al tocar un tema tan importante, una decisión creativa, moral y combativa de poner el foco justo en la humanidad de las víctimas.
La serie de Netflix no solo ha servido de entretenimiento. También para dejar lecciones en un tema tan álgido como la línea entre la vida pública y privada y los escándalos sexuales.
Las lecciones de “Intimidad”
La primera lección de la serie de Netflix advierte que, sin lugar a dudas, es un delito tanto filtrar como difundir vídeos íntimos de otras personas sin su consentimiento. Ya, es obvio, pero no está de más recordarlo cuando son miles, o cientos de miles, las personas que han cometido ese delito en España hace tan solo unas horas.
La segunda enseñanza es que la ley actual casi nunca funciona contra quienes difunden esos vídeos y algo que fue más que evidente, eue los medios de comunicación, cuando la víctima tiene dimensión pública, agrandan y ahondan el agravio para obtener clics o audiencia.
Otra de las lecciones que deja la serie de Netflix y que no hay que pasar por alto es que hay que denunciar para que la policía actúe cuanto antes y que también existen asociaciones de apoyo a las víctimas especializadas en estos delitos para acompañarlas sobre todo en el momento del shock y el miedo.
Un punto importante que queda en la serie Intimidad es que a las víctimas, sobre todo si son anónimas, les cuesta muchísimo dar el paso de denunciar o de ponerse en manos de profesionales para encajar las consecuencias del delito de la mejor manera posible. Y que sus seres queridos deben estar alerta para ayudar.