Marcela Kloosterboer siempre se ha caracterizado por ser una persona defensora de los derechos de los animales y no pierde ni una oportunidad para hacerlo ver.
Marcela Kloosterboer no pudo ocultar su indignación por el maltrato animal
La actriz argentina, Marcela Kloosterboer, expresó su molestia e indignación en Instagram al ver unas imágenes de unos caballos en la TV Pública
En ella se veía a un grupo de personas en medio de una jineteada, alentado al maltrato de la especie y de paso, tristemente, muere uno de los caballos llamado Temblor.
“No a las jineteadas. Y No a la jineteadas en la TV Pública ¿Qué es esta locura de disfrutar de la tortura de los caballos?”, expresó Marcela en su Instagram sobre los caballos.
Marcela Kloosterboer ha sido tan enfática en este tema que incluso con los platos que proponen en MasterChef manifiesta su molestia. “¿Ni uno de todos los que están ahí dice nada? ¿Nadie tiene un minuto de conciencia?. Siniestro”, escribió meses atrás sobre un reto en que los participantes tenían que meterse a un cuarto oscuro, con cortes de carne colgando del techo, y debían agarrar a ciegas algo para cocinar.
¿Cuántos años tenía Marcela Kloosterboer en Verano del 98?
Verano del 98 definitivamente marcó un antes y un después en la carrera de cada uno de los protagonistas. Tal es el caso de Marcela Kloosterboer, que solo tenía 15 años cuando formó parte del elenco de la tira producida por Cris Morena y en donde afianzó su amistad con Agustina Cherri.
La tira juvenil fue creada por Cris Morena y producida por Guillermo Pendino y Gustavo Marra. La serie se pensó para cubrir la programación del verano argentino. Se estrenó el 16 de enero de 1998 y finalizó el 17 de noviembre del 2000. Finalmente, fueron tres años de puro éxito y por esa razón, el elenco también sufrió variaciones.
La actriz dio vida a Josefina Vidal ‘Jose’. En la ficción, tenía 16 años y era la hija de Susana pero apenas la recuerda ya que desde los siete años vive con su hermana Dolores. En Costa Esperanza, lugar en donde las historias suceden, conoce a todos en el lugar.
Con el tiempo, se da cuenta de que siente algo más por su amigo Tomás, pero cuando su vínculo no funciona decide convertirse en monja, incluso aceptó irse como misionera a África. Para suerte, en ese país conoce a Bruno pero no es un amor recíproco. Pero debe volver a Costa Esperanza para cuidar a su sobrina.
Aunque en su vuelta continúa con los hábitos, no puede negar que sigue sintiendo cosas por Tomás por lo que deja de ser monja para casarse con él, pero en el intento se da cuenta que ya no está enamorada de él, sino de Pablo con quien se casa antes de morir.