Juana Repetto encendió la preocupación de sus seguidores al compartir un video reciente en el que explicó, con total sinceridad, por qué debe bajar considerablemente el ritmo durante su tercer embarazo. La actriz, que está transitando una etapa más compleja que en sus gestaciones anteriores, detalló los motivos médicos y emocionales que la llevaron a entrar en una especie de reposo preventivo.
Juana Repetto contó por qué está en reposo parcial mientras transita su tercer embarazo
Fiel a su personalidad, Juana Repetto le contó a sus seguidores el momento que atraviesa con su embarazo.
En el video, Juana comenzó relatando cómo se siente físicamente. Entre los síntomas que más la sorprendieron, mencionó una sed persistente y un agotamiento extremo que, según confesó, no había experimentado ni siquiera durante la lactancia. “¡Cuánta sed! Estoy todo el tiempo muy sedienta. ¿Será el embarazo? ¿Será el agotamiento?”, expresó con un tono que evidenciaba su preocupación. A eso sumó una frase que resonó fuerte entre sus seguidores: “Me sentí para el ort… mal”.
Uno de los puntos más delicados del embarazo tiene que ver con su historial médico. Debido a una intervención previa en el cuello uterino, los médicos le indicaron controles más frecuentes y estrictos. Juana Repetto explicó que debe hacerse una ecografía cada quince días para medir el largo del cuello del útero y corroborar que no se haya acortado. “Voy muy nerviosa. Tenemos que ver que el cuello no se haya cortado y listo”, comentó, y agregó un pedido a quienes la siguen: “Tírenme muy buena onda para que mi cuellito siga igual”.
Sobre su último control, la actriz fue muy directa: “Estoy muy sensible. No fueron las mejores noticias, pero tampoco hay nada de qué preocuparse por ahora”. Y allí llegó la frase que marcó el tono de su relato: “Lo que sí ya es un hecho es que voy a tener que estar mucho más tranqui”.
A las ecografías se sumó la llamada “curva de glucosa”, un estudio de rutina pero incómodo, que detalló paso a paso para despejar dudas entre sus seguidores. Entre extracciones de sangre, tiempos de espera y la bebida azucarada que debe ingerirse, Juana dejó en claro que su embarazo está siendo monitoreado con especial atención.
Pero lo físico no es lo único que la afecta. En su testimonio también Juana Repetto dejó ver su costado emocional: entre mudanzas, cambios de rutina y un estrés que arrastra desde hace meses la llevaron a reconocer que está viviendo este embarazo “minuto a minuto”, con más miedo e incertidumbre que en los anteriores. “La incertidumbre me desespera”, admitió.