Lo Ultimo campo | casa |

La casa de los Etchevehere luego de la usupración

El ex ministro de Mauricio Macri, Luis Etchevehere mostró los daños y los faltantes de su casa del campo que fue tomada por Juan Grabois y sus militantes.

Después de 15 días de mucha angustia por la usurpación de su campo familiar en Entre Ríos, los hermanos Etchevehere pudieron volver a ingresar y tomar posesión luego de un fallo judicial. En ese momento se encontraron con varios destrozos y faltantes en la casa principal, y serios daños económicos al sector productivo del establecimiento.

La primera noche luego del desalojo los hermanos y amigos de la familia que estaban acompañándolos tuvieron que dormir todos juntos a una sala en colchonetas y bolsas de dormir porque los dormitorios "habían quedado en un estado deplorable".

image.png

Luis Etchevehere sotuvo que lo de las carpas de los militantes para acampar fue "cuento" y que "los 34 ocupantes habían usado la ropa blanca del campo y que durmieron en los dormitorios".

"A partir de ahora vamos a ponernos manos a la obra para reconstruir lo que destruyeron en 15 días. Es como al día siguiente de una inundación en donde los productores en el campo vuelven a empezar", aseguró el ex ministro de agroindustria.

image.png

Luego detalló alguno de los destrozos que cometieron los ocupas: "Además de las barandas rotas de la galería, que pareciera que las pisaron para saltar, hay varias celosías destruídas porque violentaron los postigos desde afuera para poder entrar. En el parque realizaron unos pozos para construir un horno de barro que quedó a medio hacer. Hasta levantaron en un patio interno un altar del Gauchito Gil", contó.

Según Luis Etchevehere el ambiente que peor estaba era la cocina de la casa donde hasta arrancaron el mueble bajo mesada. Además contó que "los juguetes de madera que guardaban de sus hijos y varios estantes de maderas de la despensa pareciera que lo usaron para prender fuego porque desaparecieron".

image.png

Lo que más lamentan es que los ocupantes se llevaron un valioso cuchillo del padre que ellos conservaban como recuerdo. "Es triste ver cómo han mancillado el lugar donde nuestro padre escribía sus notas y recibía a su gente", indicó.

Para finalizar contó que la parte productiva del campo se vio muy afectada por estos 15 día de toma: "Las pasturas que estaban se pasaron. Si bien el tambo que tenemos es chico, se sacan entre 600 y 800 litros por día, el no ordeñar las vacas en forma continua les produjo mastitis", cerró Luis Etchevehere.